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Han surgido una serie de descubrimientos importantes a partir de experimentos de científicos de la NASA para estudiar cómo la radiación de Júpiter afecta la composición química de su satélite natural, que se cree que alberga un océano subterráneo.

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Un grupo de científicos cree que la luna de Júpiter, Europa, podría brillar visiblemente en su lado oscuro, ya que los altos niveles de radiación del poderoso campo magnético de este gigantesco planeta interactúan con la superficie helada de su satélite natural. También es un fenómeno que podría ayudar a los expertos a determinar si es posible mantener allí formas de vida simples, como se especifica en un nuevo estudio publicado en la revista Nature Astronomy.

Los hallazgos fueron el resultado de experimentos realizados por científicos de la NASA para estudiar cómo la radiación de Júpiter afecta la composición química de Europa, donde se cree que existe un océano subterráneo.

Con este fin, los investigadores construyeron una cámara de hielo en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (ubicado en Pasadena, California), en la que introdujeron los mismos compuestos químicos que se espera que existan en la superficie helada de Europa. Los expuso a un haz de electrones de alta energía para simular la radiación de Júpiter, de acuerdo NBC News.

Las simulaciones de laboratorio han descubierto que el hielo así irradiado emite una luz verdosa. “Vimos que cada vez que lo fotografiábamos con el haz de electrones, brillaba”, dijo Murthy Gudipati, astrofísico de laboratorio y autor principal del estudio. “Y cuando los electrones se apagaron, el brillo desapareció”, agregó.

 “La superficie de Europa experimenta continuamente altos flujos de partículas cargadas, debido a la presencia del fuerte campo magnético de Júpiter. Estas partículas cargadas de alta energía, incluidos los electrones, interactúan con la superficie rica en hielo y sal, dando lugar a procesos complejos, físico y químico ”, señalaron los expertos.

Estas características de emisión podrían utilizarse para determinar la composición química de la superficie de este satélite, en el ámbito de los vuelos nocturnos a baja altitud de naves espaciales como Europa Clipper. Por la noche, el brillo debe ser claramente perceptible para las cámaras y otros instrumentos de las sondas de la NASA. La misión Europa Clipper se lanzará en los próximos años para investigar la habitabilidad de esta luna.

Los científicos esperan que, gracias a esto, sea posible determinar qué sustancias están realmente contenidas en el océano predecible debajo de la superficie de Europa y determinar si es adecuado para albergar formas de vida.

H/T – Codigopuebla