Una joven descubre, en clase de biología universitaria, que a quién le decía papá, realmente, era su tío y que a quien le decía tío era su papá; y así, tras haber investigado los tipos de sangre de sus tatas, destapó la infidelidad de su mamá hace 21 años.

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En clases podemos aprender muchas cosas, pero jamás nos imaginaríamos que esos conocimientos puedan desenterrar hasta los secretos más ocultos; tal como ha ocurrido en California, en un insólito caso que ha dado a conocer una usuaria de Twitter llamada Anya Hettich.

Una inocente clase de biología en una universidad de California, Estados Unidos, terminó destapando un capítulo de infidelidad familiar.

Fue una compañera de clase de Anya quien empezó a atar cabos en una clase de biología, cuando la profesora explicó el cuadro de Punnett a sus alumnos. Se trata de un diagrama útil para determinar las posibilidades de que el hijo de dos personas pertenezca a un grupo sanguíneo u otro. Tras escuchar a la docente, la estudiante le dijo que tenía muchas dudas. Entendía el funcionamiento del cuadro, pero su tipo de sangre no encajaba con sus indicaciones. Había algo que no estaba bien.

“Le dijo a la profesora que su padre tenía sangre tipo 0 y que su madre pertenecía al A, pero que ella era AB», publicó Anya en Twitter. Según el cuadro de Punnett, es imposible que una hija de A y 0 sea AB, tal como le dijo la maestra al escuchar a su alumna.

“Le dijo que tenía que estar equivocada respecto a los grupos sanguíneos, incluso dibujó el diagrama para hacérselo ver”, continúa la tuitera, quien por sus mensajes ha recibido decenas de miles de respuestas.

A pesar de la explicación, la universitaria insistió en sus dudas, convencida de que el error era de la profesora. Finalmente acordaron que comprobara de nuevo su tipo sanguíneo y el de sus padres para entender dónde estaba el problema.

La ciencia no se equivoca, por eso la estudiante pudo darse cuenta que a quien durante 21 años le dijo papá era realmente su tío y a quien le decía tío, era realmente el tata.

Una semana después, la estudiante hizo una sorprendente revelación ante sus 243 compañeros. “Había descubierto que su madre había tenido una aventura con el hermanastro de su padre. Por tanto, fue criada por su tío y no por su verdadero padre y a quien le decía tío, en realidad sí es su papá. Su madre lo había ocultado durante 21 años”, cuenta Anya Hettich.

H/T – Lateja