En la constelación Leo, a unos 111 años luz de distancia de nosotros, existe un planeta considerado «hermano» de la Tierra por las similitudes que podría guardar con el nuestro. La comunidad científica acaba de anunciar un descubrimiento asombroso que cambia la forma en la que percibimos a esta otra «Súper Tierra».

El planeta que orbita alrededor de una estrella enana roja, más pequeña y fría que el Sol,  cumpliría con las condiciones para tener agua en su superficie, elemento clave para albergar la vida.

El artículo, publicado en la revista Astronomy and Astrophysics, señala que el descubrimiento fue hecho por el astrofísico Ryan Cloutier, de la Universidad de Toronto, luego de analizar los datos recogidos por el European Southern Observatory (ESO).

Poco se sabía hasta ahora del planeta K2-18b, descubierto en 2015. Los científicos habían revelado que orbitaba en una zona a una distancia tal que podía tener agua en estado líquido en su superficie. Aunque este último dato no había podido ser confirmado hasta hace poco.

Se determinó también, gracias al análisis de recientes datos, que el planeta tiene una masa mayor que la Tierra y sobre sus característica los investigadores formularon dos hipótesis.

Según la primera, esta «Super Tierra» tendría una superficie rocosa y agua en estado líquido, y de acuerdo a la segunda podría estar recubierta de un espeso estrato de hielo.

«Con los datos que tenemos a disposición, no podemos distinguir entre estas dos posibilidades», aseguró Cloutier.

Sin embargo, los investigadores mantienen esperanzas en los datos que pueda recopilar el James Webb Space Telescope (Jwst), cuyo lanzamiento está previsto en 2019.

Cloutier espera que con este telescopio puedan «sondear la atmósfera del planeta y entender si puede tener agua en su superficie».

H/T – Infobae