La nadadora japonesa, Mieko Nagaoka, ya casi cumple los 102 años y se está preparando para competir en los Juegos Olímpicos Tokio 2020.

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Mieko Nagaoka se encamina hacia los 102 años y ya ha conquistado en el agua varios triunfos mundiales en su categoría y edad, pero aún no tiene pensada su jubilación, al contrario asegura estar en buenas condiciones. «Estoy en plena forma», señala en una entrevista a la AFP después de haber nadado los 400 metros estilo libre en 26 minutos y 16 segundos, en una competición organizada por la Asociación nipona de natación en Chiba, a las afueras de la capital.

«El secreto es comer bien y estar activos. No es bueno estar sentados a mi edad. Quiero seguir nadando hasta los 105 años, y más allá», añade esta nativa de Yamaguchi, en el suroeste del archipiélago, que ha visto 22 citas olímpicas a lo largo de su vida.

Y es que Nagaoka se las trae con todo y su edad, pues eese día, ataviada con un gorro blanco y un coqueto bañador negro y naranja, sólo llegó 17 minutos después del ganador, Etsuko Azumi de 80 años.

Con los lógicos problemas auditivos, no logró escuchar los gritos del público cuando terminó su octavo y último largo de la piscina, cuando se disponía a realizar uno extra antes de que los jueces la apercibieran del final de la prueba.

De esta forma, Nagaoka expresa: «Es sólo una competición más… Nadar me hace feliz, por eso lo hago. Cuando nado estoy en mi pequeño mundo».

Así, Nagaoka se convierte en un ejemplo para las personas mayores de Japón, país con una de las esperanzas de vida más elevadas del mundo, pues junto al corredor Hidekichi, de 105 años, están en el libro de Guinness de los récords.

«Voy a seguir nadando tan rápido como pueda», señala la veterana nadadora, que ostenta varias marcas mundiales entre 100 y 104 años, entre ellas los 1.500 m nado libre, una distancia que la mayoría de personas de su edad no podrían recorrer a pie. «Seguiré mientras viva», certifica.

«Su actitud ante la vida es simplemente escandalosa», indica con orgullo su hijo Hiroyuki, de 76 años. «Ella rechaza respetar las normas. Sólo acepta los alimentos más exquisitos y pone mala cara a todo lo que no le gusta. Aceleró desde los 90 años y desde entonces récord tras récord».

Mientras tanto su entrenador, Shintaro Sawada, explica que Nagaoka se entrena tres veces a la semana en Yamaguchi y que: «Al principio pensé que bromeaba cuando decía que nadaría después de los 100 años».

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H/T – Ovación Digital