La mujer experimentó un constante dolor de espalda durante más de una década y descubrió que la causa era una aguja epidural rota de 3 centímetros de largo alojada en su columna vertebral.

Amy Bright comenzó a sentir el dolor crónico en la espalda y la pierna izquierda hace aproximadamente 15 años, inmediatamente después de dar a luz en el Hospital Naval de Jacksonville en Florida.

«Se siente como fuego, como un atizador al lado de mi cóccix», dijo Bright a First Coast News. «Y luego, en ocasiones, se dispara por el lado izquierdo de la pierna sobre la pantorrilla, y luego hacia abajo y dentro de mi pie».

A finales de 2017, Bright ya no soportaba el dolor, por lo que se sometió a una tomografía computarizada, que reveló la aguja rota atrapada en su columna vertebral.

Desafortunadamente, la aguja causó daños permanentes en los nervios y lo más probable es que el dolor de espalda de la mujer empeore con el tiempo.

«Si fueran cualquier tipo de humano, hubieran dicho ‘Oye, lo siento, cometí un gran error, vamos a arreglarlo'», dijo Bright. «Pero en cambio no me dijeron».

El abogado de Bright, Sean Cronin, quien la ayudó a presentar una demanda contra el gobierno federal por negligencia médica, fraude y encubrimiento por parte del personal del hospital, dice que está «sin palabras» porque esto no le fue revelado en ese momento a la madre.

Lo cierto es que la cirugía para quitar la pieza rota de la aguja es muy arriesgada, así que es probable que Bright tenga que vivir con ella alojada en su espina dorsal por el resto de su vida.

H/T – Actitudfem