Hay quienes duermen con una, varias o, de plano, sin ellas, pero según los especialistas tu almohada puede traerte problemas de salud.
El doctor Rogelio Castro Vallejo, Médico internista y Geriatra del Hospital Ángeles de Lindavista, explica que si bien no existen evidencias acerca de que el uso de almohadas cause enfermedades, lo cierto es que una mala elección puede agravar ciertos problemas de salud como la apnea obstructiva del sueño, dolor cervical crónico o la lesión de manguito rotador del hombro.
Para evitar estos inconvenientes tu almohada, además de ser cómoda, debe facilitar que tu cuello quede en una posición neutra, alineado con la columna, sin generar tensión. Todo esto con la finalidad de prevenir dolores de cabeza, cuello, hombros o brazos.
El especialista aconseja que las personas se aseguren de que su almohada les brinde confort y no les cause molestias al despertarse, sobretodo cuando son de la tercera edad.
¿Cómo elegir correctamente tu almohada?
– Debe proporcionarte un buen soporte, esta es la clave para lograr conciliar el sueño sin problema.
-El tamaño depende de tu comodidad, pero debes procurar que no sea muy alta para que tu cuello adopte una buena postura al dormir.
-Debes cambiarla cada dos años según recomiendan los especialistas.
-Si acostumbras dormir boca arriba, lo ideal es optar por una almohada que no sea muy alta, pues de lo contrario, tu cabeza se irá hacia el frente y tu cuello se tensará.
-Si duermes boca abajo, elige una almohada plana, pero lo suficientemente elevada para alinear tu columna vertebral y cuello.
-Si por el contrario, duermes de lado, tu mejor opción es una almohada ancha y firme.
Lo importante es que cabeza, cuello y columna queden alineados.
H/T – Salud180
