Metro, subterráneo o metropolitano, en cada país este método de transporte público recibe un nombre distinto. Pero en todos los lugares existe algo en común; las personas extrañas que se montan en él.
En un solo viaje al trabajo en la mañana podrías ver cualquier tipo de personas, desde las más normales hasta las más raras, con peculiares disfraces incluidos. Otros son tan extraños que no sabemos ni cómo calificarlos.
Aquí hay varias situaciones que te harán reconsiderar viajar en el metro o en su defecto te identificarás si alguna vez te ha pasado algo parecido.
Este hombre lleva un d$%*@ gigante en el subterráneo de Nueva York…
Cocinar en el vagón ¿por qué no?
Y ya que estamos en eso, también se puede disfrutar de una cena…
Cuando AlLF espera contigo a que llegue el tren «no hay problema»…
Ok! Esto no es raro, pero si sumamente incómodo…
H/T – Brainberries