Los récords mundiales son cada vez más sorprendentes y algunos rayan en lo absurdo. Simon Berry alcanzó uno nuevo al saltar desde un puente de más 70 metros de altura para mojar una galleta en una taza de té.

Para ser exactos, Simon saltó desde una altura de 73,41 metros y precisó muy bien la extensión y elasticidad de su cuerda para poder lograr su meta: mojar una galleta en una taza de té.

Y lo consiguió, de hecho batió el récord anterior de 60.553 metros establecido Ron Jones en Estados Unidos en 2013.

H/T – Guinness World Records