Un sacerdote dejó en claro su postura sobre el tema a través de un documento formal redactado hace 20 años, pidiendo que su eventual asesino no sea sometido a la pena de muerte.

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Como una petición más allá de la muerte fue lo que se dio a conocer con el caso de un sacerdote que hace 20 años predijo su muerte y a través de un documento formal dejaba en claro su posición en relación a la pena capital y en el que pedía que su eventual asesino no sea sometido a la misma.

Se trata del sacerdote René Robert, quien pertenecía a la diócesis de San Agustín, al norte de Florida, que el año pasado fue asesinado por Steven Murray, uno de los jóvenes a quienes constantemente apoyaba.

Precisamente su asesino enfrenta cargos por homicidio en la actualidad y el fiscal ha pedido la pena de muerte para él.

Sin embargo, los miembros de la diócesis a la que pertenecía el padre René presentaron una apelación basándose en el documento que escribió en 1.995, titulado “Declaración de Vida”, con el fin de que se cumpla su voluntad de no someter a la pena de muerte a su asesino.

Ellos presentaron un escrito firmado por más de 7.400 personas pertenecientes a la diócesis del padre Robert pidiendo que sus deseos sean cumplidos.

«Solicito que la persona declarada culpable de homicidio por mi muerte no esté sujeta ni puesta en peligro de la pena de muerte bajo ninguna circunstancia…por muy abominable que haya sido el crimen o por lo mucho que pueda haber sufrido», se lee en el documento dejado por el padre Robert.

Cabe destacar que el sacerdote fue acribillado en abril de 2016 y su cuerpo fue encontrado en un bosque en el estado de Georgia. Al siguiente día, Murray fue apresado cuando manejaba el auto de su víctima, aceptando su responsabilidad basándose en que tiene problemas mentales.

H/T – Diario Correo