En las olimpiadas no todo es deporte, también hay personas que realizan una acción muy noble como es el caso de la iniciativa de un grupo de reconocidos Chefs.

Los profesionales del arte culinario se unieron para brindarle un poco de alegría y llenar el estómago de los indigentes de Río de Janeiro, preparando verdaderos banquetes a partir de las sobras de la Villa Olímpica.

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Durante los Juegos Olímpicos los organizadores destinan por cada comida (desayuno, comida y cena) 250 toneladas de ingredientes crudos para llenar el estómago de los 18.000 atletas, entrenadores y funcionarios.

Al chef italiano Massimo Bottura -un hombre de 53 años cuyo restaurante ‘Osteria Francescana’ recientemente ganó el primer lugar en el prestigioso World’s 50 Best Restaurants- no le impresionaron las enormes dimensiones del consumo, sino la perspectiva de un gran desperdicio que podía ser usado para alimentar a muchas personas.

Foto Dado Galdieri / The New York Times
Foto Dado Galdieri / The New York Times

“Esta es una oportunidad de hacer algo que pueda marcar una diferencia”, dijo Bottura a ‘The New York Times’, y vaya que lo hizo.

Bottura se unió a otros reconocidos Chefs para crear el Refettorio Gastromotiva (en italiano refettorio quiere decir comedor), un lugar con el que esperan que cambie la manera en que los brasileños y el mundo en general conciben el hambre, el desperdicio de comida y el sustento de la dignidad humana.

El improvisado restaurante se edificó en una descuidada zona del centro de Río. Este proyecto comenzó a funcionar en un cubo semitransparente construido a toda velocidad en el barrio de Lapa, donde un grupo formado por algunos de los chefs más famosos del mundo se afana en una cocina repleta de voluntarios.

Foto Dado Galdieri / The New York Times
Foto Dado Galdieri / The New York Times

 

Los ingredientes, que inicialmente iban a ser desechados, son donados al comedor, al igual que el trabajo de los chefs y los meseros, que en algunos casos llegaron a Río desde California, Alemania y Japón.

“Esto no solo es una obra de caridad; no solo se trata de alimentar a las personas (…) Esto tiene que ver con la inclusión social, con educar a la gente sobre el desperdicio de comida y darle esperanza a quienes la han perdido por completo”, dijo Bottura.

Reffetorio Gastromotiva cuenta entre su personal con luminarias de la cocina como Alain Ducasse, Virgilio Martínez Véliz y Joan Roca, nombres que resaltan entre los 50 chefs registrados para los turnos en la cocina.

¡El mundo necesita más iniciativas como esta!

 

H/T – The New York Times