Trinity Smith había oído rumores de que había un perro que solía vagar ladrando en una montaña de Colorado, en Estados Unidos, así que por ser una gran amante de los animales, sintió que tenía que hacer algo.

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La curiosidad la invadió, pues en esa parte de la montaña no hay personas ni casas, así que no era muy probable que hubiese un perro, por tal, muchos pensaban que se trataba de un lobo.

Pero Trinity tenía una razón poderosa para subir a la montaña y averiguar de qué se trataba, y es que unas semanas antes había desaparecido una perrita de la zona llamada Chloe.

Trinity no tardó mucho en descubrir que los rumores que había oído eran ciertos. Cuando llegó a la montaña, ella misma escuchó el ladrido de un perro. Pero era imposible saber de dónde procedía el ladrido, se escuchaba muy lejano.

Se hizo tarde y Trinity tuvo que detener su búsqueda para continuar al día siguiente, esta vez acompañada de su amigo Sean Nichols. Ambos dieron vueltas gritando para ver si podían atraer al perro durante tres horas, sin ningún resultado.

Pero justo cuando estaban a punto de darse por vencidos, oyeron algo: un ladrido de perro y esta vez sí pudieron saber de dónde venía el sonido y se precipitaron hacia esa zona.

Pronto lograron divisar un delgado cuerpo de perro, tumbado en una roca. Era muy obvio que el animalito necesitaba ayuda, y no hubiese podido sobrevivir mucho más tiempo ahí si Trinity y Sean no lo hubiesen encontrado.

En ese momento aún no lo sabían, pero resulta que, como habían sospechado, se trataba de Chloe, la perrita de 14 años que se había perdido seis semanas antes, cuando salió de senderismo con su dueña. Tras su desaparición, sus dueños la buscaron todos los días durante semanas, pero había pasado tanto tiempo que sus dueños habían perdido la esperanza de encontrar a su querida perra con vida.

Trinity y Sean llevaron en brazos a Chloe hasta su coche, e informaron por redes sociales que habían encontrado el perro que ladraba por las noches.

Enseguida la noticia llegó a los dueños de Chloe, quienes contactaron de inmediato con Trinity para decirles que se trataba de su perra.

Ahora, Trinity y Sean van a menudo a visitar a Chloe y se han hecho muy buenos amigos. Aún no está recuperada del todo, pero va por buen camino. Si ha sobrevivido seis semanas sola en la montaña, ¡puede superar cualquier cosa!

H/T – Newsner