¿A quién no le gusta dormir? La verdad es que un sueño reparador nos hace sentir con más energía y ser más positivos, pero, además, esto previene el riesgo de padecer diabetes tipo 2 o de sufrir obesidad, entre otros trastornos metabólicos.

Te puede interesar: Las mujeres necesitan dormir 20 minutos más que los hombres

Según un estudio realizado por un grupo de investigadores de las universidades de Lubeck, en Alemania, Cambridge, en Reino Unido, y Tubingen, en Alemania, sugiere que, además de la predisposición genética, existen una serie de factores que determinan nuestra salud metabólica, como los hábitos de alimentación, el ejercicio físico y también el sueño.

¿El sueño? Sí, y es que el dormir mejor o peor influye en la capacidad del organismo para controlar lo que comemos, para metabolizar la glucosa y para mantener el equilibrio de energía durante todo el día.

Los expertos hacen referencia a que las costumbres que se han puesto de moda en nuestro estilo de vida moderno, como permanecer en la cama con el móvil, la consola, la tableta o el portátil, están afectando al ciclo de sueño natural, quitándonos horas de sueño y poniendo en riesgo nuestra salud.

El estudio sugiere que, aparte de dejar a un lado los dispositivos electrónicos en la zona de descanso, mejorar las condiciones ambientales de la habitación como evitar el ruido o la luz, pueden aumentar la calidad y la duración del sueño y con ello mejorar nuestra salud.

 

H/T – Radio Mundial