Una niña nacida el mes pasado en Estados Unidos, se convirtió en la primera bebé en Norteamérica que tuvo una madre que recibió un trasplante de útero de una donante fallecida.

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Lindsey McFarland, que tiene aproximadamente 30 años de edad, deseaba convertirse en madre, pero un problema con su útero se lo impedía.

Sin embargo, para finales del 2017 llegó su oportunidad cuando una paciente en edad fértil y con la matriz sana acababa de morir.

Dos años después, nació su hija sana y salva, siendo la primera bebé en Estados Unidos en nacer bajo estas condiciones, y la segunda en el mundo, pues en diciembre de 2018, ocurrió esta misma hazaña en Brasil.

Cabe señalar que este procedimiento ya había sido intentado por primera vez por la Cleveland Clinic en 2016.

Aunque todo parecía bien al inicio, antes de que se realizara la extirpación del útero de la mujer, los médicos se dieron cuenta de que la paciente desarrolló una enfermedad bacteriana que había sido difícil de identificar.

Los doctores notificaron a la mujer y tuvieron que quitarle la matriz, no obstante, ya no pudo ser candidata a un trasplante, pero gracias al avance de la tecnología posteriormente se pudieron realizar procedimientos exitosos.

McFarland forma parte de un innovador estudio llamado Uterine Transplantation for the Treatment of Uterine Factor Infertility de dicha clínica, que involucra a 10 mujeres con infertilidad por factor uterino.

Las mujeres que tiene UFI no tienen útero, o se les extrajo, por lo cual no pueden quedar embarazadas.

Dicha investigación está evaluando si recibir un trasplante de útero de un donante fallecido podría permitir que estas mujeres queden embarazadas a través de la fertilización in vitro y que puedan dar a luz.

A diferencia de otros programas de trasplante de útero, el ensayo de la institución utiliza solo úteros de donantes que han muerto recientemente.

Esto elimina el riesgo de dañar potencialmente a un donante vivo, que necesitaría someterse a una cirugía abdominal mayor para extirparle al útero.

«El trasplante de un útero en una mujer es un procedimiento complejo que requiere la supresión de la respuesta de su sistema inmunológico», señala el cirujano de trasplantes Andreas Tzakis en un informe de la Clínica Cleveland.

«A través de esta investigación, nuestro objetivo es hacer que estos eventos extraordinarios sean comunes para las mujeres que eligen esta opción. Estamos agradecidos con el donante. Su generosidad permitió que el sueño de nuestro paciente se hiciera realidad y que naciera un nuevo bebé», agregó.

H/T – Telemundo