El Miss Venezuela enfrenta un grave escándalo que incluye corrupción y hasta una supuesta red de prostitución entre algunas de las participantes.

Desde 1952, Venezuela se ha posicionado como una potencia en el mundo de los concursos de belleza, imponiendo récords en el Miss Mundo (donde acumula 6 coronas) y 7 títulos de Miss Universo, más la hazaña de ganar dos años consecutivos en ese certamen.

Si bien la organización Miss Venezuela ha enfrentado grandes escándalos a lo largo de su historia, posiblemente ninguno como el que actualmente hace tambalear su ética hasta el punto de «cerrarlo».

Luego de que se hiciera pública la renuncia de Osmel Sousa de la presidencia, las redes comenzaron a inundarse de acusaciones y señalamientos que involucran corrupción, favoritismos y hasta prostitución.

Es por eso que la Organización Miss Venezuela emitió un comunicado, en el que fija posición ante todas las acusaciones:

«Por más de 40 años, la Organización Miss Venezuela se ha enfocado en la formación de talento con belleza interna y externa, capaz de competir con éxito en cualquier escenario nacional e internacional; contribuyendo así al empoderamiento de la mujer venezolana. La Organización nunca ha consentido ni aceptará ningún acto que perjudique de forma alguna su reputación y la de sus participantes.

Es por ello, que, ante los hechos descritos recientemente a través de las redes sociales, blogs anónimos y por algunas personas que tuvieron relación con el Miss Venezuela, se ha tomado la decisión de iniciar una revisión interna para determinar si algunos de sus relacionados, durante el curso de sus gestiones, ha incurrido en actividades que quebranten los valores y la ética del certamen. Mientras este proceso se desarrolla, la Quinta Miss Venezuela cerrará sus puertas y tanto los castings de Miss Venezuela como de Mister Venezuela, quedarán temporalmente suspendidos.»

El concurso, perteneciente a Cisneros Media, concluyó en el anuncio: «Entre las acciones contempladas, se encuentran: la creación de un nuevo Comité de la Belleza; la reorganización completa del Miss Venezuela; así como la implementación de una figura representante de las Misses, encargada de canalizar cualquier inquietud sobre temas que pudieran vulnerar sus derechos u obligaciones o que quebranten el código de ética del certamen».

Según el portal noticiaaldia.com: «La intempestiva medida surge tras el escándalo desatado por la presunta vinculación de exparticipantes del popular concurso de belleza venezolano con la Fundación Diego Salazar, organización que se encuentra siendo investigada por casos de corrupción y lazos con la trama de Andorra y desfalcos a PDVSA (Estatal petrolera de Venezuela)».

Igualmente, hacen referencia a las acusaciones que hizo la presentadora Annarella Bono, quien a través de sus redes sociales lanzó nombres de ex participantes relacionadas sentimentalmente con empresarios cercanos al gobierno de ese país que al parecer habrían usado su influencia en la competencia.

 

H/T – Eonline