Son muchos los que sufren de la resaca del Año Nuevo, pero ya podrás disfrutar sin posteriores lamentaciones, porque hay unos trucos infalibles para evitarlas.
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Es muy normal sentirse tan feliz en esta fecha que implica grandes ingestas de alcohol, pero que a la mañana siguiente pasan la factura, y es a lo que se conoce como la clásica resaca de Año nuevo.
Un dato interesante que quizá no sabías es en cuanto a la comida, pues todos sabemos que tomar bebidas alcohólicas con el estómago vacío puede ser fatal, pero también lo es que comamos en exceso.
Sin embargo, a continuación te dejamos unos trucos para que puedas evitar la resaca del Año Nuevo:
1. Modera el consumo de alcohol
Los cotillones de Fin de Año suelen incluir barra libre de bebidas por lo que es probable que se pierda la cuenta de los cubatas que se han ingerido. Es importante ser prudentes a la hora de consumir alcohol y hacerlo de forma responsable.
2. Más proteínas y verduras en la cena
Controlar lo que se come es fundamental para prevenir la resaca del día siguiente. Es importante facilitar a nuestro cuerpo que haga la digestión, y para ello se recomienda la elección de alimentos proteicos y con grasas buenas como el salmón así como no escatimar en el consumo de vegetales.
3. Un vaso de leche, protector natural de estómago
Es fundamental comer de forma lenta y pausada para facilitar la digestión de aquellos alimentos que puedan producir ardor, como son el chocolate o los alimentos muy grasos. La leche es un protector de estómago natural, por lo que beber un vaso de leche desnatada o sin lactosa ayuda a que la comida no caiga tan pesada. Lo mismo ocurre con las infusiones de manzanilla o menta, que en la sobremesa ayudan a digerir la cena.
4. Bebe mucha agua
El principal síntoma de la resaca, el dolor de cabeza, es fruto de la deshidratación, puesto que el alcohol es muy diurético y fomenta la producción de orina. Sabiendo esto es importante beber mucha agua, antes, durante y después de la ingesta de alcohol. Existen también alimentos con altos porcentajes de agua en su composición, como son la sandía, las lechugas y las espinacas, con casi un 93% de agua; también la leche, los yogures y las manzanas, con un 85% de agua.
5. Cuida tu postura
Además de la ingesta de alimentos y bebidas alcohólicas, la postura del cuerpo puede favorecer que la digestión no se haga correctamente, por lo que es importante estar de forma que no se doble el estómago, es decir, con la espalda lo más recta posible. También es recomendable caminar para que la digestión se produzca de forma más rápida, evitando los incómodos síntomas de pesadez y gases que pueden favorecer la aparición de la resaca.
H/T – Lavozdegalicia
