Una de las cosas que prevalece y se enfatiza bastante en la mitología griega son los castigos del padre de los Dioses y sus hijos, hay algunos personajes como Prometeo que por su astucia y su picardia hicieron enfurecer a el dios del rayo y tuvieron que someterse a castigos que ponían en duda la inclinación del Dios mayor en la balanza del bien y el mal, un castigo como estos puede ser el que se le impuso al famoso Sísimo en el inframundo.
Comerciante y navegante, era un hombre de gran riqueza en la mitología griega, sin embargo, sus actos no estaban libres de pecados, pues era sabido que tenía cualidades de un hombre avaro y tramposo, se llegó a pensar que incluso su astucia era más grande que la de Prometeo, llegó inclusó a asesinar viajantes para robar sus riquezas, pero la vida le dio un giro cuando se le presentó Tánatos (Representación de la muerte sin dolor) y éste no se entregó y logro ponerle grilletes para que no pudiera llevárselo, sin embargo, a raíz de esto, Ares intervino para por fin llevarse al hombre al inframundo.
Sin embargo, las trampas de Sísifo no terminaron con su muerte, sino que desde el más allá convenció a Hades de que le dejara volver al mundo de los vivos para castigar a su esposa por no haber honrado su muerte como debía ser. Luego de que se encuentra en el mundo se rehuso por todos los medios a volver al inframundo y vivió un par de años más hasta que por fin fue capturado y llevado por Hermes.
Y aquí fue donde comenzó el tortuoso castigo por culpa de su burla hacia Hades, el cual consistía en empujar una piedra colosal cuesta arriba en un lugar muy empinado hasta la cima, sin embargo, el castigo radicaba en que cada vez que estuviera en ella, la piedra se deslizaba hacia abajo y el tenía que repetir el proceso una y otra vez por toda la eternidad.
Hay numerosas teoría y alegorías de como puede ser interpretado el mito, algunos ven el castigo de Sísifo como la misma vida del hombre, el cual se esmera en alcanzar algo con todas sus ganas para darse cuenta de que la victoria es efímera y le siguen más luchas, otras de lo fútil de la benevolencia de las personas frente a determinados actos, de una forma u otra, el mito puede tener una enseñanza que está fuertemente ligada a la ambigüedad y la subjetividad, pudiéndose tomar desde diferentes puntos de vista según el criterio y la búsqueda personal.
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