Francia comenzó a aplicar este 2017 una ley que reconoce el derecho de los empleados a desconectarse del trabajo, en particular de sus móviles y correos electrónicos, fuera de las horas laborables. Algo que jefes de otras partes del mundo deberán tomar en cuenta.

La medida forma parte de la reforma laboral adoptada por el gobierno de François Hollande y el texto prevé que las empresas de más de 50 empleados entablen negociaciones para garantizar el respeto de las horas de descanso y la vida personal de los asalariados.

Si las partes no logran alcanzar un acuerdo, la empresa tendrá que redactar un texto que establezca las modalidades de aplicación del derecho a la desconexión.

Con esta normativa se busca también proteger la salud de las personas, pues según estiman algunos especialistas la exigencia de reactividad y disponibilidad permanente provoca estrés y agotamiento laboral.

Sin embargo, esta ley no prevé sanciones, por lo que se teme que su impacto sea limitado. Algunas empresas francesas como el banco Axa o el grupo nuclear Areva ya habían tomado medidas similares, como la interrupción de los correos electrónicos durante la noche o el fin de semana.

H/T – Informe21